Reduccionismo

En diferentes medios, y por parte de diferentes personajes públicos, he escuchado repetirse el argumento de que el movimiento de indignados, que se ha plasmado en la concentración de Sol y otras muchas ciudades, responde a la frustración de una generación ante las consecuencias que para ellos tiene el clima de Crisis económica que viene aconteciendo. Por el camino además se entremezclan una serie de ideas que nada tienen que ver con lo que está ocurriendo:

Ilustrare esto con algunas sentencias de lo más aclaratorias:

- “ Lo que pasa en España es que siempre queremos lo que no tenemos”

- “ ¿Por qué se manifiestan en Sol si protestan contra los culpables de la Crisis?”

- “ No ha fracasado el sistema sino el Gobierno”

- “ No veo ninguna razón para desalojar Sol, a quien hay que desalojar es a la auténtica antisistema que se sienta en la Casa de Correos”

ESTO ES UN REDUCCIONISMO, bien fruto de la ignorancia, bien fruto de las malas intenciones que tratan de deslegitimar y relativizar lo que se está poniendo encima de la mesa.

Por una parte se reduce la preocupación por el porvenir y devenir de una sociedad al malestar de un sumatorio de individualidades que no ven colmadas sus aspiraciones materiales.

Por otra parte se identifica la protesta con una sola generación, desligándola de toda aspiración por el Bien Común. Esto se realiza minimizando los testimonios de personas de toda clase y reduciendo el colectivo de “indignados” a aquellos que físicamente están acampados en Sol.

Se identifica a la clase política criticada, el bipartidismo de los “profesionales de la política” - no a todo el sistema de partidos, como intrínseco del Sistema, de tal modo que la protesta se califica de Antisistema. De aquí deriban las calificaciones a utópicas, pataleta de niños mimados,…(ver declaraciones de E.P. 20-V-2011) Los partidos mayoritarios se auto-identifican con la figura de Estado, cuando ellos son sólo unas herramientas al servicio de dicho Estado y su condición de Mayoritarios debería ser circunstancial y no intrínseca (la ecuación de H’om ya se encarga de eso)

Se identifica el malestar con una situación económica - normalmente aprovechando para exculparse como causantes -. Como se recoge en innumerable documentación se trata de la expresión de un malestar frente a un modo de gestionar la vida pública por parte de una casta política, que está al margen de los intereses que la legitiman, la ciudadanía (véase su inoperancia y su corrupción *), y que se sirve sólo a sí misma y a quienes la benefician, poderes financieros.

Se aprovecha la supuesta ausencia de objetivos específicos para reducir el fenómeno a un acontecimiento con la etiqueta de berrinche.

Por último y aclaratorio, la situación económica actual es sólo un síntoma de la Crisis que vive el Sistema y la actuación de algunos de sus Elementos (unidades funcionales) y por los vínculos perjudiciales establecidos entre Elementos del mismo. Las elecciones municipales y autonómicas son un marco adecuado para la revalorización y toma de conciencia de lo expuesto en las quejas pero no es el objetivo de éstas.

En definitiva, bien por incapcidad, bien malintencionadamente, se simplifica un epifenómeno tras una lectura inocua, trivial y condescendiente.

Fuentes directas

http://democraciarealya.es/?page_id=88
http://tomalaplaza.net/2011/05/18/manifiesto-acampada-sol/

Testimonio en 1ª persona

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