Desplazamientos varios

Ya la primavera apuntó maneras amenazando mi, de usual, sedentario disfrute de los fines de semana con bodas y escapadas serranas. Pero ha entrado el verano y parece ser que el tren de los desplazamientos me ha cogido de lleno, y los dos últimos fines de semana han sido extendidos e intensos.

El anterior hice el petate rumbo a levante, a alegrar el día a mis abuelos, que están ya n una residencia de la Vila Joiosa, y a los que desgraciadamente, porque soy un desgraciao por no hacerlo más.

De paso, aproveché para despedir a la primavera remojándome el culo, y se me pusieron los dientes largos con los preparativos de las Festes de S.Joan.

Este último nos hemos visto inmersos en una boda Gitana, 3 días, más bien 2 y resaca, compartiendo la Felicidad de nuestros amigos entre amigos:

Tras tratar de evitar, con relativo éxito, la hora punta en la A6 llegamos a la casa cuartel que habíamos reservado en Tiznajos como cubil. La casa estaba muy bien, cuidado hasta el más último detalle, 21 camas disponibles en un laberinto de habitaciones, dos salones comedor…Lastima que nosotros sólo la rentabilizásemos para dormir, porque tras reposar un poco en los sofás, sesión de chapa y pintura, y más guapos que un San Luis a la ceremonia y posterior banquete. Todo en el Rancho de la Aldegüela.

La ceremonia, con lagrimas y sonrisas varias, el convite,…, de órdago a grande. Para retratarlos, decir que acabamos con la cerveza a las 3horas y que los segundos eran Cordero O Cochinillo; nosotros somos más de copulativas así que fue Cordero Y Cochinillo.

Al día siguiente continuamos, a una hora apropiada (16h zulu), con una paellada (la primera decente, la segunda lograda) para cargar las pilas de cara a las vaquillas de por la tarde. A todo esto, la música y la barra libre constante. Y por si fuera poco, cuando se decide levantar el campamento, ya bien caída la noche, en el pueblo de acogida están de berbena. Los Irreductibili del grupo dieron señal de ella. Y es que “Un envite es un convite”

Yo, previsor ante el madrugón del domingo me retiré a planchar la oreja. Aunque eso no evito que el fin de fiestas lo pusiera un “aceituno” que juzgo imprescindible sancionar mi marcha en una A6 vacía, de 4 carriles, por el tercero de la derecha. Recurriremos, pues huele a golpe de genio y a la necesidad recaudatoria impuesta a la benemerita.(este nombre es un sarcasmo, no?). ¿Alguna indicación pertinente? Pues soy primerizo.

Así pues, si me veis cansado, no es cansancio, es el desplazamiento, que aturde.