Meta -Blog

El término Metafísica surgió cuando, una vez muerto Aristóteles, los estudiosos trataron de clasificar todo lo que las meninges del macedonio habían parido.

El poyo debía ser insoportable; todo lo que se le cruzaba por delante del nasso lo analizaba, clasificaba y trataba de encajarlo dentro de su cosmovisión en estado de continua ampliación. El típico que en lugar de echar un polvo con la jamona local se pasa la noche tomando notas mentales para la disertación y clasificación del papo eleno.

Pues resulta que habían guardado los textos en los que se cuestionaba sobre la naturaleza misma del Ser y la Existencia justo después de los que hablaban de las cuestiones de la física, y el imaginativo archivero los bautizó como “Metafísica: lo que está más allá de la física”. Y acertó el jodio, pues se trataba de lo que la física no podía abordar.

Cuando, dentro de una obra de teatro, se representa otra obra de teatro, se dice que se habla de Metateatro (+ aquí). En literatura sucede lo mismo, y hay ejemplos de novelas que hablan de cómo escribir una novela, o novelas sobre escritores. Aquí inciso literario para recomendar “La Historiadora”, una novela muy animada y atrapante que Isa, tan cercana al tema del libro, me recomendó.

Este Meta- pone de manifiesto una reflexión acerca no sólo de un asunto del ámbito en el que se enmarca. Reflexión que en el caso de los blogs me parece que no se cultivado bastante.

Ante las nuevas tecnologías solemos dejarnos llevar por la curva de aprendizaje, el cómo, en lugar de tomarnos un tiempo para explorar el para qué. Aunque no lo creáis, conocer el origen e intención de un canal de comunicación (o lo que sea), no es una perdida de tiempo, es el trabajo que permitirá poner en juego la imaginación cuando hayamos terminado de aprender como hacer lo que hasta ahora otros han ideado.

Por ello echo en falta un poquito de meta-blog para no perdernos por el camino.