Como diría el de Aerosmith: It’s Amazing la gran Manzana. Tanto que me robó la voz. Eso si, a punta de frío de pelotas. Esto es, que me traje una faringitis.
Tiene 1001 cosas que ver, 3001 poyadas que comprar, 5002 comidas raras que catar, e innumerables rincones que reconocer de las pelis. Es como haber estado allí, o haber soñado con ella. Tan lejos y tan cerca.
Y eso que le viaje tiene todos los ingredientes para acabar odiando a la ciudad: un sistema de inmigración denigrante, precios muy caros, un sistema de propinas muy raro, y un frío de pelotas.
Pero aun así he, hemos, han vuelto encantados del viaje.
Hemos hecho el completo: Rascacielos, barco, Estatua, Broadway, Harlem, misa gospel, compras, Hellskitchen, Chelsea, Soho, CentralPark, Museos, …así que tengo tantas cosas que contar que he decidido que es mejor que salgan supurando conforme asiente los recuerdos y reflexiones.
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2 comentarios:
tío, a mí me encantó N.Y!! y eso que estuve mucho menos tiempo que tú :S
la sensación de estar viviendo en un película es increíble. Y esos souvenirs tan tirados de precio!? Eso sí, no es oro todo lo que reluce... ni perfume lo que sale de las alcantarillas ;)
me alegro de que lo hayas disfrutado! un abrazo
¡Qué bien, chicos!
Ya me contaréis más cosas y me enseñáis fotillos.
¡Besos a los dos!
________________________fati.
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